Los hermanos pueden verse afectados por las lesiones cerebrales tanto como los padres. Dependiendo de la edad, pueden sentir que podrían haber protegido a su hermano o tal vez que la lesión fue su culpa. Diferentes niños o adolescentes se ven afectados de diferentes maneras.

Algunos niños se vuelven miedosos y exageradamente cuidadosos. Otros pueden volverse irritables y rebeldes. Y otros pueden actuar como si nada hubiera cambiado.

Todas estas respuestas son reacciones normales a la incertidumbre y el trastorno que provoca una lesión cerebral. Las siguientes páginas brindan información sobre cómo pueden reaccionar niños de diferentes edades a la lesión de un hermano y qué pueden hacer ustedes como padres para ayudarlos a enfrentar la situación.