A medida que su hijo(a) crece, cada vez estará más ocupado(a) y no tendrán tanto tiempo para estar juntos. Aunque estén muy ocupados ahora, dediquen tiempo a planificar actividades que disfruten hacer con su hijo(a).
Es importante que cuando pasen tiempo juntos, NO usen ese tiempo para intentar darle un sermón. Hay muchas otras oportunidades para hacerlo. ¡No echen a perder los buenos momentos!