1. Detente y piensa

Esta ya debería ser una estrategia familiar para ti. Siempre que quieras cambiar un comportamiento, tienes que detenerte y pensar en lo que estás haciendo.
2. Monitorea

Muchas veces, monitorear, o hacer seguimiento, es suficiente para cambiar el comportamiento. Por ejemplo, las personas generalmente gastan menos dinero cuando hacen un registro de lo que compran.
3. Evalúa

Cuando estás con otras personas, puedes utilizar la forma en la que esas personas reaccionan para obtener información sobre tu comportamiento.
- Usa las señales que te dan otras personas. Si tus amigos sonríen, ríen o asienten con la cabeza, entonces probablemente tu comportamiento esté bien.
- Sin embargo, si tus amigos se ven molestos, aburridos o confundidos, entonces es hora de pensar que algo no está bien.
- Esto puede ser algo fácil de pensar, pero puede ser difícil evaluar una situación en la vida real.
4. Reflexiona

Después de tomarte tiempo para detenerte, monitorearte y evaluar la situación, es hora de reflexionar sobre lo que está pasando. Piensa en lo que está ocurriendo y qué es probable que pase después
- ¿Las cosas están saliendo como tú quieres?
- Si no es así, ¿qué puedes hacer diferente?
- ¿Cómo puedes cambiar tu comportamiento para mejorar el resultado probable?
5. ¡Intenta algo diferente!
Si te das cuenta de que estás yendo por el “camino equivocado”, intenta algo nuevo. Usar la estrategia “Detente, Monitorea, Evalúa, Reflexiona, Intenta” no es algo que se logre de un día para otro. Se necesita práctica y algo de ensayo y error para que veas qué funciona y qué no funciona